Hoy, se había cumplido 5 años desde que no visitaba el Palacio de la Aduana, ubicado en el corazón del Centro Histórico de Cartagena. En ese período, sus gobernantes pasaron penosamente. No inspiró al periodista para escribir un solo renglón positivo de los actos de sus desastrosos huéspedes. El que duró cuatro años, hizo como las moscas, vomitó todo su veneno sobre la ciudad. Pero, los cien días de esta nueva administración de Cartagena, son 100 actos de Dumek Turbay Paz y de su equipo de gobierno que hablan por sí solos y que inspiran contar la historia. Así como fuimos implacables con el anterior administrador, hoy nos toca quitarnos el sombrero con el actual.
En efecto, desde el 1 de enero de 2024, se nota el cambio en La Heroica. En sus calles, barrios y esquinas. ¡Y en la gente! Desde el Centro Histórico hasta el barrio El Pozón pasando por Olaya, Mandela o Blas de Lezo, hay nuevos aires que inspiran. Si se quiere resumir la filosofía gubernamental de Dumek Turbay, se haría en una sola frase: un gobernante con resultados.
No obstante, hay problemas estructurales que no se resuelven automáticamente, como la inseguridad, la pobreza, la desigualdad degradante y la patología colectiva. La ciudadanía no espera discursos de los mandatarios. Tampoco la vieja estrategia de la nueva demagogia de atacar la supuesta corrupción de otros para justificar la propia o su negligencia. Los mandantes esperan que las promesas se transformen en realizaciones desde el primer día del gobernante.
Los 100 actos de Dumek
Sin embargo, además de no hablar demasiado, un gobernante no llega para calentar el sillón del gobierno y desde allí ordenar para que otros ejecuten. Por eso vemos los 100 actos de Dumek hasta en las playas, parques, canchas y plazas reducidas al ostracismo en estos últimos 5 años. Vemos a Dumek resolviendo pequeños y grandes problemas. Así está pagando la deuda social histórica de un Distrito que, en las dos últimas dos décadas, viene de tumbo en tumbo. Una deuda que los cartageneros más débiles esperan que se la paguen.
Ahora bien, Dumek no es un hombre callado. Habla, pero hace. ¿Qué es un santo? No lo creo. Pero ¿de qué nos sirve un gobernante hablador de fina paja sin acción? Un mandatario debe ser de acción pura, como aquellas clásicas películas hollywoodenses. Si habla, que sea proporcional a lo que hace. ¿Acaso la gallina no cacarea cuando pone un huevo?
Se van a cumplir 100 días y serán 100 actos de Dumek. Duelale a quien le duela, es la verdad. ¿Qué le vamos hacer? El anterior alcalde, cuyo nombre debes adivinar para no olvidar, nos llevó al fondo del precipicio con una sola palabra que hizo honor a su verdadera catadura: ¡“malandrín”! Desconfía de aquellos que dicen ser “incorruptibles” y acusan a los demás de corruptos. Es una lección que los mandantes (los electores) debemos aprender. ¿O no ven también el caso del ingeniero Rodolfo Hernández, hasta presidente iba a ser?
Dumek con “la mona” en la mano
Cualquier día, de estos 100 días de Dumek, lo vemos en acción. Cuando esto se escribe, se le ve con el casco blanco de seguridad anunciando para el viernes 22 de marzo la demolición del esperpento del edificio Aquarela, un atentado contra el patrimonio arquitectónico colonial de Cartagena:
“Todo listo para el primer monazo en el edificio Aquarela. Le llegó el día a este adefesio que puso en riesgo nuestra declaratoria de Patrimonio de la Unesco”
El esperpento arquitectónico fue construido por la Promotora Calle 47 SAS sancionada por la Superintendencia de Industria y Comercio con una multa de $696.000.000, que hasta ahora no ha pagado.
Ejecutor no hablador
Los mandantes eligen a los gobernantes para que ejecuten. No para que hablen paja. Muchos se hacen adornar de un ejército de aduladores con estrategias comunicacionales efímeras que inflan al gobernante como a un globo. Pero, bastaría una agujita para que explote. ¿No le sucedió a William Dau Chamat?
Gobernar al Distrito es distinto a la gobernación. Esto lo tiene claro el alcalde Dumek Turbay Paz. Si para el presupuesto del 2024 Yamilito Arana solo tiene $2.786.055.523.619. Dumek cuenta con un jugoso recurso de $3.418. 388.909.170, amén de la incorporación presupuestal que le aprobó el concejo por la suma de $ 597 mil millones más un empréstito por $60 mil millones para el alcantarillado de Bayunca.
Me habían dicho que el 1 de enero del 2024 el despacho de la alcaldía de Cartagena olía a cachimba de loco o loca. Pero, muy probablemente era un olor a caucho quemado. Algo parecido a una revoltura de tabaco con marihuana y bazuco quemado. Pero, hoy pude percibir olores floridos y las banderas de Cartagena y Colombia serenas en las alturas. Esperemos que la escoba de Dumek Turbay Paz siga como nueva en los cuatro años. Así confirmará que es un gobernante de resultados, duela a quien le duela.