Entre pitos, fuegos artificiales y en medio de una gran multitud que lo seguía, fue recibido el gobernador de Bolívar, Dumek Turbay Paz, quien vistiendo una camiseta del equipo Real Cartagena, fue ovacionado desde la comunidad Los Calamares, durante la inauguración de una cancha sintética en ese lugar. Donde se invirtieron más de 3 mil millones de pesos en su construcción, el recinto cuenta con la mayor “atracción tecnológica, para el beneficio de propios y visitantes”.
El gobernador saliente, culmina una obra que le había prometido a los cartageneros, demostrando que con voluntad y esmero se pueden hacer las cosas. Un buen gerente no solo debe enfocarse en las grandes obras sino en aquellas que generen cambios, soluciones y son más meritorias, cuando sacan sonrisas y lagrimas a sus habitantes.
Esos espacios eran terrenos olvidados por quienes tenían la responsabilidad en su momentos de adecuarlos y darles un mejor uso, pero de igual modo, allí se reunían niños y adultos para practicar cualquier actividad deportiva, sin importar que jugaban sobre piedras, polvo y desechos. Solamente disfrutaban, llenos de sueños e ilusiones
Dumek, precisó “no hay nada más bonito que ver a un niño sonriendo. Toda la comunidad del barrio los Calamares debe ahora mantenerlo limpio y conservarlo, por el bien de sus hijos, aquí ellos comenzaran a hacer realidad sus sueños”.
En la otra esquina se encontraba el alcalde de Cartagena, Pedrito Pereira, quien dijo que esas son las obras que necesita la ciudad, aludiendo que esas áreas se convertirán en los espacios de sueños para los más pequeños de la casa.
Durante la actividad “el Pibe Valderrama”, ejemplo del deporte en Colombia, no se quedo atrás y siendo fiel a sus raíces samarias expresó con euforia “esta bacana la cancha”, y al mismo tiempo dio un espaldarazo al gobernador, por ese logro alcanzado.