Tengo por costumbre realizar escritos con carácter crítico, amparado en temas constitucionales y políticos, he atacado sin tregua la injusticia y la corrupción sin encontrar apoyo. Pareciera ser que a la sociedad, no le afecta que unos pocos se queden con los recursos públicos que pueden ser invertidos en beneficio de todos, tampoco le importa que nos impongan impuestos, reformas, leyes y decretos para beneficio de ciertos sectores. La indiferencia y el silencio es el alimento para la ambición de los corruptos.
Ante la ausencia de interés por el control social, he cambiado un poco mi forma de pensar; la democracia es la tiranía de la multitud, y si la multitud es iletrada, tendrá lo que se merece; un pueblo ignorante, sumiso y de cafres, estará bajo el poder de un gobierno hampón, con todas las ramas del poder público actuando como sus secuaces.
Estado podrido
El Estado Social de Derecho colombiano está podrido por la corrupción, porque el pueblo así lo quiere y lo permite. Nos encanta vivir de esta manera, que nos engañen en campaña los políticos, elegir al peor, no hacer, no decir, esperar que pasa, y resistir es un estilo de vida adoptado por la sociedad Colombiana.
Gran oportunidad tenemos de cambiar, o de auto exterminarnos para siempre, debido al poder letal del nuevo coronavirus COVID-19; los científicos no han podido encontrar vacuna, antídoto o medicamento que contenga su potencial destructivo, a nivel mundial las víctimas fatales aumentan con el paso de los días y los contagios se multiplican.
Las medidas adoptadas por el gobierno, sacrifican la economía de pequeños comerciantes, de emprendedores y de los profesionales independientes. Todo demuestra que quien originó el terrible virus, sabía lo que hacía, su trabajo fue planeado y de tal forma que su propagación se diera en todos los confines de la tierra, sin barreras de clima, esto debido a la facilidad de dar la vuelta al mundo en corto tiempo.
Virus letal
La especie humana está en peligro por un pequeño virus con contenido letal, no podemos hacer nada, solo estar en nuestras casas y lavarnos las manos; si los científicos no encuentran vacuna rápida muchos morirán, por eso debemos dedicar todos nuestro esfuerzos en salvar nuestras almas. Solo la gracia de Dios podrá, mantenernos sanos y a salvo, para que lo inevitable, nuestra partida de esta vida, nos permita alcanzar la vida eterna en paz.
Si te queda difícil obedecer y quedarte en casa, si decides no salvar tu vida del peligro, que nos acecha, es tu decisión; tal vez no pierdas tu vida, pero con la desobediencia ayudaras a que muchos pierdan la suya.
Estamos a tiempo de salvar nuestras almas, el arrepentimiento de nuestras conductas equivocadas o pecados para la iglesia, es la oportunidad de encontrar la salvación, y gozar de la gloria de Dios padre en el cielo. Muy duro sería perder la vida y tener que despertar en el infierno donde ya tiene un lugar destacado todos estos políticos y funcionarios corruptos, que tendríamos que soportar durante la eternidad, no sería justo, teniendo la oportunidad de salvar nuestras almas acompañarlos en la perdición del infierno.