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Una serie de atentados en diferentes regiones de Colombia golpeó este jueves a la Fuerza Pública y a la población civil, dejando un saldo preliminar de 18 muertos y más de 65 heridos, según informes de las autoridades.

El hecho más grave ocurrió en Amalfi, Antioquia, donde un helicóptero de la Policía fue derribado mientras apoyaba labores de erradicación de cultivos ilícitos.

La aeronave , atacada presuntamente con drones, transportaba a un grupo de uniformados que participaban en operaciones de aspersión terrestre. En el siniestro murieron 13 policías.

El presidente Gustavo Petro atribuyó el ataque al Frente 36 del Estado Mayor Central de las desidencias de las Farc, aunque hasta ahora ningún grupo armado se ha adjudicado la autoría.

Atentado contra base aérea Marco Fidel Suarez en Cali

De manera casi simultanea, Cali vivió un atentado con cilindros bomba contra la base aérea Marco Fidel Suarez, en el norte de la ciudad. La explosión dejó al menos 65 heridos y graves daños en viviendas y edificios cercanos.

La alcaldía ordenó la evacuación de varias zonas y restricciones de movilidad mientras los equipos de emergencia atendían a las victimas. El alcalde Alejandro Eder anunció una recompensa de 400 millones de pesos por información que permita identificar y capturar a los responsables.

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En Florencia, Caquetá, un artefacto explosivo detonó a una cuadra de la alcaldía

Aunque no se registraron victimas, el gobernador Luis Francisco Ruiz Aguilar señaló que el hecho estaría relacionado con acciones extorsivas de grupos armados ilegales bajo el mando de alias Caquetá.

El presidente Petro calificó la jornada como un “día de muerte” y vinculó los ataques a reacciones violentas de las desidencias tras recientes golpes militares en el Cauca.

Las explosiones y el derribo del helicóptero se producen en medio de crecientes cuestionamientos a la política de “paz total” que buscaba ampliar el dialogo con grupos armados pero que, según sectores de oposición, coinciden con un deterioro de la seguridad en varias regiones.

Mientras tanto, las autoridades locales y nacionales mantienen operativos de seguridad e investigación en las tres ciudades para esclarecer los hechos y dar con los responsables.

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