El alcalde William Dau se fuma a Cartagena: 233 homicidios. Mientras hace payasadas.
El alcalde William Dau se fuma a Cartagena: 233 homicidios. Mientras hace payasadas.

Hoy, William Dau, como siempre, se metió su fuma mañanera antes de salir para la ciclovía. El Zambiloco se le vio pedalear unos metros por la avenida Santander. Sus pulmones y los tabiquetes de su nariz parecen que están desgatados para resistir el pedaleo, como se puede notar en la foto que se adjunta. Mucho humo almizclado han pasado por sus vías respiratorias. Mientras hacía esta payasada, la Policía Metropolitana de Cartagena―Mecar nos dijo hoy, que los muertos de anoche son: Laura Vanessa Molinares Martínez (comerciante), Yeison Castro Luna (mecánico) y Ronald David Gómez Cervantes (concejal de Tolú). Son 233 homicidios hasta la noche del sábado 12 de agosto.

En efecto, los 233 homicidios (ojo al dato) hacen presagiar que agosto será tan violento como julio cuando se registraron 44 asesinatos.

Te puede interesar: Cartagena sitiada por el crimen y la ineptitud (I)

Los 233 homicidios con un alcalde líquido

Pero, las estadísticas de este año seguramente superarán el horroroso 2022 donde hubo 441 muertes violentas. De estos muertos, el 85% fue por la modalidad de sicariato. Así se confirma, desafortunadamente, las predicciones de VoxPopuli Digital: el último año del Zambiloco será uno de los peores que soportará esta ciudad líquida, a la manera como lo señala el psicólogo Zygmunt Bauman. Por dentro nos desgarramos, aunque por fuera la Unesco nos mantenga como Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad. Dau debe salir ya! El gobierno debe declarar a Cartagena en emergencia total.

Cartagena es líquida como su alcalde. Si no fuera así, desde hace rato lo hubiese sacado del Palacio de la Aduana. Los gobernantes expresan, de una u otra forma, la personalidad de sus electores. Desde el principio, VoxPopuli Digital señaló el derrotero de la debacle que nos esperaba. Y todavía faltan 5 meses, a no ser que la Procuraduría y la Fiscalia actúen.

¿Por qué la violencia? 233 homicidios

Laura Vanessa Morelos Martínez, es una de los asesinados la noche del sábado. Van 233 homicidios.
Laura Vanessa Morelos Martínez, es una de los asesinados la noche del sábado. Van 233 homicidios.

La teoría de la alienación, entre otras, que utilicé para explicar el fenómeno de la violencia en Colombia en el libro ¿Adiós a la Guerra? (2016) , se podría utilizar en el caso cartagenero, como el fenómeno de las ciudades más violentas del mundo. Sin embargo, existen unas particularidades que el investigador social debe descubrir para entregar un análisis científico. Si bien la alienación es un proceso donde el individuo queda enajenado y actúa guiado por un sistema de creencias, existen unos factores que son detonadores de su comportamiento violento.

Con el fin de llegar a un análisis más profundo en el caso particular de Cartagena es necesario hacernos las preguntas formuladas en la entrega No 2 de esta serie periodística.

Allí nos preguntamos: ¿Por qué no hay articulación estratégica de la Policía, la Fiscalía y el Distrito? ¿Cuáles son los golpes de alto impacto contra la delincuencia organizada de la ciudad? ¿Cuál es el papel del CTI para combatir a las bandas criminales? ¿Cuantos investigadores tiene el CTI? ¿Cuál es su operatividad?

Esos interrogante, inicialmente, se lo haré a los siguientes funcionarios: William Dau Chamat, alcalde de Cartagena; Wharlinton Iván Gualdrón Gualdrón, comandante de la Mecar; Iveth Hérnandez Sampayo, Directora de la Fiscalía Seccional.

Te puede interesar: ¿Por qué mataron a Yorman si era tan sociable? (II)

La hipótesis: No están articulados

La hipótesis dominante es que no existe ninguna articulación institucional para combatir el crimen común, el crimen de alto impacto y el crimen de las estructuras armadas que dominan la ciudad. Las instituciones funcionan como ruedas sueltas.

Ahora bien. ¿En qué han terminado los famosos consejos de seguridad? La respuesta es elocuente: terminan en nada. Lo que hace la policía no responde a un plan de seguridad ciudadana. No hay prevención. El sistema no funciona. La semana pasada la Mecar nos informó que detuvieron a 88 personas presuntamente protagonistas del crimen en la ciudad. ¿Qué pasó esta semana que hoy concluye? Los hechos hablan por sí solos. Esas capturas no disminuyeron los crímenes de alto impacto de esta semana que termina.

Dau, fumando espero

Cartagena de Indias, como ciudad turística y portuaria, se había caracterizado solo por la exportación de cocaína y por abastecer a un mercado local asociado al turismo. Pero, en las dos últimas décadas, el consumo se ha expandido exponencialmente en extramuros. El microtráfico prosperó tanto, que hoy se convirtió en un gran negocio de proporciones industriales para los traficantes de droga.

En tanto que la ciudad no se repone de los ataques sicariales de ayer sábado, uno de los más violentos de los últimos meses, el alcalde fumando espera. La muerte por sicariato de tres personas y de las heridas sufrida por el pensionado de la Policía Nacional, Luis Carlos Meléndez Cortés, candidato a edil por el partido Liberal, indican que las estructuras armadas de la delincuencia están activadas.

En julio, la Policía registró 44 homicidios, 27 de ellos bajo la modalidad de sicariato. Al cierre del primer semestre de 2023 se produjeron 199 homicidios. El número menos alto que podamos recordar fue del periodo del año 2013 cuando solo fallecieron 80 personas.

En el 2023 se han reportado 13 asesinatos en enero, 21 en febrero, 17 en marzo, 18 en abril, 18 en mayo, 23 en junio y 44 en julio. En total, con los muertos de esta semana, las estadisticas nos dicen que van 233 homicidios. Como se dijo, la mayoría bajo la modalidad de sicariato.

En esencia, si el alcalde se da por la torre, su cabeza no le funciona. El único recurso que le queda es hacer payasadas para las cámaras de una oficina de prensa que no tiene nada bueno que comunicarle a los periodistas y a la ciudad. ¿Podrá salir el alcalde antes de que se termine de fumar la ciudad? La Procuraduría y la Fiscalía tienen la palabra.

Share.