Lo dijimos, si Petro no gana en primera vuelta que se olvide de la presidencia. Los resultados de las elecciones de la primera vuelta confirman los análisis que se habían hecho en Voxpopuli Digital. El único de los tres candidatos que mantenía una tendencia al crecimiento a la presidencia de Colombia era Rodolfo Hernández, «el Trump colombiano». Pero la sorpresa fue la derrota de las maquinarias electorales que representaban al régimen neobonapartista.
La campaña de «Fico» Gutiérrez confió mucho en las maquinarias electorales. Los partidos tradicionales que le acompañaban, al parecer, no aceitaron su engranaje. En el mes de mayo, «Fico» se estancó, hasta el punto de que algunos de los líderes de los partidos tradicionales se abstuvieron de invertir en el aceite que las maquinarias necesitan para funcionar. Por lo menos, en la Costa Caribe no se observó ese aliciente que ellas regaron en las elecciones parlamentarias del 13 de marzo. Sus líderes electorales se quedaron esperando ese estímulo material.
Resultados del preconteo
El último boletín No 62 de la Registraduría Nacional emitido a las 7:19 de la noche de hoy domingo 29 de mayo señala lo siguiente;
- Gustavo Petro Pacto Histórico 40,32
- Rodolfo Hernández Liga Anticorrupción 28,15%
- Federico Fico Gutiérrez, Equipo por Colombia 23,91%
- Sergio Fajardo Centro Esperanza 4,20%
- Jhon Milton Rodríguez 1,29%
- Enrique Gómez Martínez 0,23%
- Ingrid Betancourt 0,07%
- Luis Pérez 0,05%
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El análisis
Las encuestas habían advertido que en el mes de mayo el único de los candidatos que creció fue el ingeniero Hernández. En los análisis que hicimos en VoxPopuli Digital consideramos que el exalcalde de Bucaramanga era el único que estaba en condiciones de disputar una masa de indecisos que llegaba a más del 14%. Petro ni Fico estaban en condiciones de enamorar esa masa, porque se habían estancado en su crecimiento. Y en una disputa electoral el que no crece está condenado a bajar. Y eso fue lo que pasó en el mes de mayo a Petro —que no le permitió llegar a más del 50% de los votos— y a Fico entrar a segunda vuelta.
En consecuencia, los planes del régimen tenían que cambiar. Fico ya no podía ser su salvador. Entendieron que no podían repetir la misma fórmula que usaron con Iván Duque y que realmente lo estaban haciendo. El candidato no había respondido. Por mucho que invertían en la campaña y en la estrategia y marketing electoral, no subía.
El plan B
Como Fico no crecía, los estrategas del régimen comenzaron a analizar el fenómeno. Se dieron cuenta que debían jugarsela con Hernández, puesto que Petro le ganaba en segunda vuelta a Fico. No había duda.
Entonces, comenzó a echar en marcha el plan B para salvar al régimen. Los grandes aparatos propagandísticos del establecimiento se pusieron al servicio del Ingeniero Hernández. Ya no lo ridiculizaban con las metidas de patas en las primeras de cambio. Ya no le recordaban que su hombre más admirado era Adolfo Hitler, uno de los sanguinarios más grande que tiene la historia moderna de la humanidad. Tampoco lo relacionaron con Álvaro Uribe, quien al decir de Hernández, es el mejor presidente de la historia que ha tenido Colombia.
De igual manera, el petrismo se la enfiló a Fico. En cierto modo, el candidato de Equipo por Colombia sirvió de distractor para que el fuego enemigo no detectara al verdadero hombre del uribismo y del régimen. De hecho, salió intacto hasta el punto de escalar más de 8 puntos en menos de una semana, que era la decisiva. Petro no creció. Tampoco Fico.
Cómo crecerá Hernandez
El candidato del régimen es Hernández. Todas las fuerzas de Fico se plegarán a su candidatura. Sus 5 millones de votos se van con el ingeniero. De esa manera acumulará hoy 11 millones. Si le sumamos una parte de los votos de Fajardo y los que recibieron los otros candidatos podría llegar a más de 12 millones de votos.
Sin embargo, para segunda vuelta se podría disminuir la abstención en varios puntos porcentuales. Si se logra bajar en 5 puntos, en segunda vuelta podrían votar 2 millones más. Por ejemplo, hoy votaron 21.417.774 de 39.002.239. Si todos esos 2 millones votaran por Petro, no le alcanzaría para alcanzar a Hernández, porque apenas alcanzaría 10,5 millones.
Sin duda, para que Petro gane la presidencia debe desarrollar una estrategia que le permita enamorar a ese electorado que no se manifestó hoy. Esa franja que está dormida y que no se levantó para ir a votar por un verdadero cambio. Para que esto sea posible, Petro debe buscarse 5 millones de nuevos votantes. ¿Lo logrará? Lo dejo a la imaginación de los lectores. ¿Rodolfo Hernández será el salvador del régimen?