Un mes después de sancionar la ley 2379 de 2024 que modifica la ley 617 del 2000, el presidente Gustavo Petro declararía en la plaza pública: «Palenque ¡libre de Mahates!». Por segunda vez, este pueblo de negros libres, probará la libertad, ya no del yugo español, sino del polvoriento y olvidado Mahates, que corre la misma suerte de pobreza de los otros 45 municipios de Bolívar.
Esta libertad decretada legalmente por el congreso para elevarlo de corregimiento a municipio, será el motivo de la visita del compañero Presidente y del alto gobierno. La noticia se la confirmó a VoxPopuli Digital, la directora de la Unidad Nacional de Víctimas, Lilia Solano, quien también llegará al evento a celebrarse a las 9 de la mañana del 23 de agosto en Palenque.
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¿La segunda libertad de Palenque?
Palenque es Obra Maestra del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad (2005). Tiene más de 3 mil habitantes de orígenes disímiles de pueblos africanos que fueron esclavizados por otras tribus africanas enemigas vendidas a negreros belgas, portugueses y holandeses. Los barcos ingleses, portugueses y españoles los transportaban en condiciones infrahumanas al continente americano ávido de una mano de obra para sus plantaciones y las profundidades de sus socavones.
Puesto que en el siglo XVIII la población indígena había sido diezmada por el trabajo forzado, la servidumbre española y las nuevas enfermedades, como la sífilis, la importación de negros esclavizados se aligeró. Al mismo tiempo, creció la población de negros cimarrones (hombres y mujeres libres montaraces) que formaron palenques libres en la espesura de la selva tropical.
Los palenques más aguerridos, como el Palenque de Arroyohondo, fueron exterminados por orden de la Corona Española. Este palenque, también situado en jurisdicción de Mahates, asaltaba las diligencias que transitaban el camino que une Cartagena con la Barranca del Rey. Aquí se embarcaban en pequeños botes hacia el puerto de Calamar de donde salían al interior del país por el río Magdalena. Así lo explica el historiador Francisco Pacho Sarabia en su texto “Santa Bárbara de Arroyohondo, pueblo de negros al encuentro con su historia”.
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El proyecto de ordenanza
La nueva ley, cuyo ponente fue Aida Quilcué, Partido Mais, sin duda, es una reivindicación de la libertad de los pueblos. Y esto lo entiende el presidente Gustavo Petro. Porque son pueblos que, en otrora, fueron esclavizados y sometidos a grandes vejámenes por la visión colonialista―eurocéntrica que todavía pervive en la política dominante del país.
Por tanto, no basta con proclamar el siguiente nivel de San Basilio de Palenque, el Compañero Presidente debe ir a un nivel superior. ¿Podría contemplar la creación de un Distrito Especial que canalice recursos para esa vieja región que giraba en torno a Mahates? Esto tiene un sustento territorial y un acervo cultural, ya que en esa subregión existieron los palenques más aguerridos de la lucha por la libertad. En esa época había una espesura donde nacían libres los cimarrones rebelados. Una espesura montañosa como Songó, Capira y La Bonga, que son bosques tropicales comunicados con el ecosistema Canal del Dique.
¿Compensación para Mahates?
Pero, también, se debe pensar un tipo de compensación para Mahates. El nuevo municipio reduciría sus ingresos por concepto del turismo que el mismo pueblo de Palenque le genera. Ahora quedaría prácticamente desmantelado y profundizaría aún más su pobreza histórica, cuya responsabilidad es de la misma clase dirigente.
De manera que los tiempos del antiguo Cantón de Mahates ―donde estaban San Cayetano, Marialabaja, Ternera, El Yucal y Campo de la Cruz― hace siglo y medio quedó atrás. Desde 1845, las grandes haciendas forjadas por africanos esclavizados, también cayeron cuando Mahates dejó de ser paso obligado hacia el interior de Colombia.
En efecto, para que se concrete ese mandato legislativo, el gobernador Yamil Arana, diputados y la misma comunidad de Palenque, debidamente articuladas, se deben poner de acuerdo para que la segregación del nuevo municipio no afecte demográfica y económicamente al antiguo ente territorial.
VoxPopuli Digital consultó a varios diputados, entre ellos el conservador Javid Benavides Aguas y Zaith Adechine de Salvación Nacional. Coincidieron en señalar que en estos momentos se está en un proceso de articulación entre la gobernación, la asamblea y las comunidades de Palenque para presentar un proyecto de ordenanza lo más pronto a la Comisión del Plan de Desarrollo Bolívar Mejor. El primer debate es clave para resolver los grandes interrogantes que el proyecto encierra.
¿Palenque ¡libre de Mahates!?
¿Pero esto hará libre nuevamente a San Basilio de Palenque? ¿Se librará de la pobreza histórica de Mahates? No es fácil responder esta pregunta. El hecho de que al ser declarada Obra Maestra del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad, no trajo automáticamente prosperidad para Palenque, pone a dudar a cualquier persona con dos dedos de frente.
En 2015, por ejemplo, una década después de esa declaratoria, los índices de necesidades básicas insatisfechas (NBI) de San Basilio de Palenque registrados en una encuesta de estudiantes de la universidad La Salle, son alarmantes: 76,7% de la población presentaba, al menos, una necesidad básica insatisfecha, es decir, 2886 personas se encuentran en estado de pobreza.
Si hay voluntad, se puede
¿Palenque ¡libre de Mahates!? Podrá ser libre de Mahates, pero de la pobreza se duda. Cuando uno de sus nativos más sobresalientes, Kid pambelé, ganó la corona mundial de boxeo en la categoría walter jr. (28 de octubre de 1972), los periodistas le preguntaron qué haría por su pueblo. Respondió:
«¡Palenque quiere lú!»
Al año siguiente, Kid pambelé llegó acompañado de Andrés Pastrana, hijo del presidente Misael Pastrana y una cuadrilla de la Electrificadora de Bolívar que se conectaron de la estación de Malagana. Y por fin, Palenque tuvo luz y se pudieron ver la próxima pelea de Pambelé en la plaza del pueblo.
Así como narro el hecho de la energía eléctrica, también puede suceder con la dirección del nuevo ente territorial. Solo si hay voluntad política de servicios, los pueblos se desarrollan. Este será uno de los grandes desafíos de su nueva nomenclatura. Se pueden dar un nuevo gobierno y una nueva forma de organización social que responda a la cultura de sus ancestros. Pero también, un desafío para la nueva realidad de Colombia empeñada en salir de la pobreza y del olvido.
No obstante, hay un hándicap para el próximo nivel de San Basilio de Palenque. Es el territorio y el poder. ¿Cuál será la territorialidad del nuevo municipio? ¿Qué población realmente tendrá? ¿Cuáles serían sus transferencias? ¿Le alcanzará esos recursos para atender a su población que está situada en un poco más de 3 mil habitantes? ¿Cómo se nombrará su primer alcalde? Si queda situada en un municipio de sexta categoría ¿cómo será su burocracia de funcionamiento?
¿Un municipio hidrocefálico?
Otro de los temores fundados de los diputados de Bolívar es que se podría crear un municipio hidrocefálico. ¿De dónde va a salir los recursos para mantener una frondosa burocracia? La Asamblea Departamental de Bolívar tiene tres meses para oficializar a Palenque como municipio. Faltan dos meses para que la corporación realice el debate correspondiente y apruebe la ordenanza.
Cuando eso suceda, el gobernador de Bolívar, Yamil Arana Padauí, lo anticipó, sancionará de inmediato el proyecto aprobado para que se convierta en ordenanza. Así tendríamos el 47° municipio de Bolívar y el 10104 del país.
Pero existen muchos bemoles, como se puede apreciar en este análisis.
Gersel Pérez, de Cambio Radical, fue el autor del proyecto que le dará vida al municipio de San Basilio de Palenque. En tanto la ponente del proyecto, Aida Quilcué, dijo
“San Basilio y Palenque cuentan con una historia larga de resistencia cultural y tendencia única en el continente americano. Es considerado el primer pueblo libre de América al oponerse a las prácticas esclavistas de los españoles”.
Sin duda, el nuevo municipio presupone nuevos desafíos para Bolívar. Un departamento que está sometido históricamente a un proceso de desmembración provocado principalmente por los egos clientelares provincianos que no se traducen en desarrollo y prosperidad para el gran conglomerado. Sigue en la pobreza y en la marginalidad. Así lo demuestra con creces Córdoba y Sucre, departamentos que se desagregaron del Gran Bolívar. ¿Será distinto San Basilio de Palenque? Amanecerá y veremos, dijo el ciego.