Se estremece «Casa Blanca» del califato Daes—Char en Barranquilla. El llamamiento a proceso penal por corrupción al electorado de uno de sus más destacados líderes, el senador Arturo Char Chaljub, hermano de Alejandro Char Chaljub, será uno de los juicios más espectaculares de esta década. Este proceso podría marcar el inicio del fin de uno de los imperios políticos que se ramificó en todas las esferas de una ciudad que en otrora fuera un remanso de paz.
Los escombros de «Casa Blanca» golpearán a varios parlamentarios de la región Caribe que se eligen consuetudinariamente con el mismo sistema de «empaquetados» de la exsenadora Aida Merlano Rebolledo. La apertura de investigación penal y llamado a indagatoria de la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) contra el expresidente del senado Arturo Char Chaljub, según medios de prensa, produciría la caída en cascada de los políticos del Atlántico y de otros departamentos del Caribe. Por lo menos, quienes se eligieron con el mismo modus operandi del período 2018-2022.
¿Por qué a indagatoria?
El principal argumento que tuvo el magistrado ponente de la Sala de Instrucción Penal de la CSJ para citar a indagatoria al expresidente del senado, de acuerdo con el expediente citado por la revista Semana en primicia, se refiere a que hizo parte del concierto criminal por el cual fue condenada Aida Merlano.
Por esa razón llega a proceso con la sindicación principal de concierto criminal agravado para elegirse como senador de la república. El mismo cargo por el cual fue condenada su otrora aliada Aida Merlano.
«Casa Blanca» no fue la única
Se debe tener como evidencias que «Casa Blanca» de Aida Merlano no fue la única que ha funcionado en las épocas electorales en Barranquilla. Desde que se consolidó el poder Daes—Char, se crearon múltiples sedes ubicadas estratégicamente como una red de empresas comerciales del voto, según testimonios de recolectores de votos y mochileros al servicio de clanes políticos. La matriz de «Casa Blanca» todavía no ha sido descubierta por los investigadores de la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia. Este sería el reto que deben asumir en tiempo presente.
Cada senador tiene su propia «Casa Blanca» que depende del músculo financiero y político de los califas mayores Daes—Char. Pero el respectivo candidato puede o debe buscarse una cofinanciación de su proyecto político. Esto fue lo que hizo Merlano Rebolledo, quien tenía la financiación de Julio Gerlein Echeverría. Pero, para asegurar la victoria, debía contar con el apoyo Daes—Char. En el proceso está documentado que los Char le entregaron 500 millones.
El inicio formal de la investigación contra el senador Char Chaljub es una consecuencia de la compulsa de copia de la sentencia condenatoria contra la senadora electa y exrepresentante Aida Merlano Rebolledo. Por ende, Arturo Char, el Gato Volador y otros parlamentarios y candidatos mencionados en el proceso, deberán responder por los mismos delitos demostrados en esta sentencia que fue confirmada en segunda instancia por la Sala Penal. (Para leer, déle clic).
«Casa Blanca» y los otros
En la cláusula decimoquinta de la parte resolutiva, la Sala Penal de la CSJ decidió compulsar copias de esta actuación a la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia y a la Fiscalía General de la Nación. Esto con el fin de iniciar las investigaciones a que hubiere lugar. Las investigaciones de la Corte, como es obvio, están avanzando, no así en la Fiscalía General de la República de Francisco Barboza.
Sin duda, la Corte podría abrir investigaciones contra el Gato volador, Laureano Acuña, y sus fórmulas a la cámara de representantes. El modus operandi de su elección fue el mismo “entramado criminal electoral” usado con la elección de Aida Merlano Rebolledo. La senadora electa, tuvo una formula en Atlántico (Lilibeth Llinás) y otra en Bolívar (Emeterio Montes). La primera se ahogó pese a haber recibido 47 mil votos. El segundo libró su curul, pero renunció a la reelección en este año porque pretende ser gobernador de Bolívar en representación del clan Montes Medina.
Las investigaciones contra «Casa Blanca»
La mayoría de parlamentarios del Atlántico son elegidos directa o indirectamente por la alianza económica—política del clan Daes con el clan Char. Los partidos políticos en el Atlántico perdieron sus fronteras ideológicas y tradicionales desde las épocas de surgimiento de la nueva clase política. No importa el partido político. La afiliación política es irrelevante. Lo importante es matricularse en los designios del califato, el cual funciona como una forma de gobierno vertical. Nada se mueve si no está autorizado por los de arriba.
El apoyo popular de esta forma de gobierno fue ganada con una estrategia comunicativa dominante a partir de la captura de los medios de comunicación y de los periodistas con el mismo sistema de «empaquetados». Pero también de los íconos culturales y deportivos de la ciudad. Vale decir, Junior, el Carnaval de Barranquilla y las emisoras iconográficas de la vieja Barranquilla.
El califato y su apoyo popular
Indiscutiblemente este proceso lo inició Fuad Char Abdala en 1972. En este año se convirtió en accionista mayoritario del Junior y propietario de Radio Olímpica. Farid, su hermano, fue el primero en incursionar en la radio, pues, le gustaba la vida bohemia, la música y la radio. Pero su hermano mayor tenía pretensiones mayores. Los mejores periodistas y locutores deportivos se peleaban por hacer parte de los «empaquetados» de los Char. Locutores famosos como Edgar Perea Arias y Jairo Paba Salcedo, por ejemplo, fueron grandes aduladores de Fuad Char a quien apodaron el «rey Midas», todo lo que tocaba lo convertía en oro.
En 1979, conocí a Fuad Char. En 1982 lo entrevisté varias veces para Promec Televisión. Era un pelaito que le hacía preguntas atrevidas al que se perfilaba como el califa de Barranquilla. Fuad es de pocas palabras, pero efectivas. Tiene una visión de águila en los negocios y en la política. Al principio hacía aportes a las dos campañas electorales que se perfilaban como ganadoras de la alcaldía de Barranquilla y de la gobernación del Atlántico. Nunca perdía.
Fuad y la concentración del poder
Como ministro de Desarrollo en 1987 aprendió que el poder político le traía más dinero. Sus empresas se expandieron en la década de los 90. Todo indica que hizo generosas donaciones a las campañas políticas de los presidentes Betancur y Barco. En sus gobiernos fue nombrado gobernador del Atlántico con el apoyo político de Mayorías Liberales de Pedro Martín Leyes Hernández. Siendo senador por su propio movimiento político, Voluntad Popular, en 1991 hizo alianza con la AD-M19 y rompió una coalición liberal con José Name Terán, Jaime Vargas y Hernán Berdugo, y el ex gobernador Arturo Sarabia Better que apoyaban a Martín Leyes.
El exsenador y exgobernador Fuad Char Abdala no tiene ningún remordimiento para romper cualquier acuerdo que le signifique perder. Una vez rompió la coalición liberal, se acercó a Héctor Tico Pineda Salazar, quien era el candidato del M19 para la gobernación. Hizo que Pineda depusiera para favorecer a un candidato que tenía debajo de manga, el historiador Gustavo Bell Lemus. El nombre surgió gracias a la buena relación que ya Fuad Char tenía con la esposa de Bell, que hoy es su esposa, María Mercedes de la Espriella. (Eugenio Díaz Peris era su candidato a la alcaldía de Barranquilla. En una forma canallesca, al decir de Moisés Pineda Salar, pocos días antes de las elecciones, bajó la candidatura de Díaz Peris para apoyar al padre Bernardo Hoyos Montoya. Contrató una encuesta privada donde Hoyos se ganaba lejos la alcaldía, y como fiel comerciante fenicio, no quería perder. Su visión de águila no lo traicionó. Ganó por punta y punta, gobernación y alcaldía.
La política como supertienda
Fuad Char entró a la política como patrocinador. Colocó a los políticos al servicio de sus aspiraciones económicas. Luego, los fue desplazando hasta colocarse al frente del poder político total. Los Daes, por su parte, entraron como socios económicos. Las evidencias que hemos reseñado en este medio indican que el propósito de la política de los clanes era lavar sus capitales de dudosa procedencia.
Así como los Char vieron la oportunidad de aliarse a la AD-M19 (1991), los Daes pudieron apoyar al Pacto Histórico. Derecha o izquierda no tiene relevancia en la lógica del Daescharismo como tampoco ética o moral pública. Para ellos, la política es solo un negocio que se reduce a la compra y venta de votos que debe dar como resultado un elegido. Una vez elegido le debe representar la multiplicación de sus ingresos.
Esta transacción, por supuesto, no la hacen directamente. No hay necesidad. Financian al candidato y, ya elegido, se pone al servicio de su incesante deseo de acumulación capitalista. No importa la naturaleza del cargo, sea en el congreso, la alcaldía, la gobernación o la presidencia. Por esta razón, su poder económico tiene los brazos muy largos en casi todas las esferas del Atlántico y del país.
Karen Abudinen, un botón de muestra
En efecto, muchos creen que la exministra de las TICs y exdirectora del ICBF, Karen Abudinen Abuchaibe, es cuota política de los Char. Pero están equivocados. Ella es de las propias entrañas de los Daes. Además de ser prima hermana de Christian y José Manuel ‘Yuyo’ Daes Abuchaibe, Karen Abudinen fue la cuota política de los Daes en los gobiernos de Juan Manuel Santos e Iván Duque.
Los Daes querían que Karen Abudinen fuera quien reemplazara a Jaime Pumarejo en la alcaldía de Barranquilla. Pero debido a la quemada que se dio en el ministerio de las TICs con el famoso contrato de los Centros Poblados, su nombre quedó relegado hasta cuando se resuelva este caso. Por esta razón, Alex Char está preparando su regreso a sus viejos feudos del califato, después de su accidentada incursion en la consulta presidencial de marzo.
«Casa Blanca» y Emeterio Montes
Tal como lo dijo VoxPopuli Digital en su momento, en la residencia del patriarca Fuad Char Abdala tuvo lugar una reunión de alto turmequé en 2017. Allí, según las fuentes anónimas que participaron en esa cumbre, se definió una estrategia de expansión y consolidación de la alianza política que fortalecería el poder Daeschariano en la región Caribe. Vale decir, que a esa reunión fue invitado Germán Vargas, candidato presidencial y líder de Cambio Radical en su momento. También estuvieron representantes de los clanes del Atlántico: los Gerlein, los Name, los Daes. Por Bolívar asistió William Montes Medina, exsenador condenado por la parapolítica.
En las elecciones de 2018 fue elegido representante a la cámara Emeterio Montes de Castro, sobrino de William Montes. Fue la fórmula a la cámara de Aida Merlano. El esquema de la elección de Emeterio, por inferencia razonable, fue el mismo usado por la condenada Aida Merlano. Ahora, Emeterio será el candidato del clan de los Montes para la gobernación de Bolívar en las elecciones de 2023. Por esta razón, declinó en su reelección y su curul la ocupó su primo hermano Andrés Guillermo Montes Celedón, hijo del financista político Guillermo Montes Medina, hermano de William Montes Medina.
Se trata de que la Fiscalía y la opinión pública tenga pistas directas de la forma cómo se captura el Estado en las regiones. En este sentido, la conducta que se tipifica en estos hechos por los cuales la CSJ llamó a indagatoria al expresidente del congreso, es la misma que pudieron cometer otros políticos del Atlántico, Bolívar y de todo el Caribe. Por esta razón, un análisis acertado de “Casa Blanca”, de la condena de la exparlamentaría Aida Merlano y de la indagatoria de Arturo Char, nos llevará a predecir que el Aidaescándalo tendrá consecuencias penales y políticas. En la segunda entrega veremos por qué cayó “Casa Blanca”.
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