Los consabidos sitios de Cartagena y Bolívar donde se presentan deslizamientos de tierra, es consecuencia de sobreexplotación de sus recursos naturales. Por ejemplo, canteras o bosques. De igual forma, construcciones improvisadas y violación de las normas ambientales. Esto es lo que podría suceder en la falda de La Popa, San Francisco, y Loma del Marión. En tanto que en Turbana, tiene una sistemática explotación de canteras que sirven de drenaje y contención natural de las aguas. Esta sería la causa primordial de los deslizamientos en la vereda El Chorro y la Legua.
Por supuesto, los afectados urgen atención inmediata de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres-UNGRD. La atención deben brindarla, en primera instancia, los municipios con el apoyo del gobierno departamental y nacional.
Sin embargo, no basta con atender a los damnificados e indemnizarlos. El Estado debe parar la sobreexplotación de los recursos naturales de la ecorregión de Turbana, que han sido devorados por grandes industrias como Cementos Argos y la expansión industrial de Mamonal. (Lea: ¡Cartagena colapsó!).
Así se desmoronan las parcelas de El Chorro
Como se muestra en este documental, así se caen a pedazos varias parcelas de la vereda El Chorro y La Legua, jurisdicción de Turbana. A menos de 12 kilómetros de Cartagena vía a Mamonal. Vea este documento como testimonio de lo que sucede en esta parte de Turbana.
Deslizamientos de tierra de Loma del Marión
Los deslizamientos de tierra donde se hace más evidente es en La Loma del Marión, ubicado en la Urbanización Nueva Granada, al suroccidente de Cartagena, sigue desmoronándose. Hasta ahora se desconoce el número de damnificados que viven en situación de riesgo y zozobra. Gran parte de la loma se vino abajo. El muro de contención construido en 2010 impidió el deslizamiento de tierra hacia donde se encuentran las primeras viviendas.
Sin embargo, en los sitios no cubiertos por el muro de contención, como se aprecia en la gráfica adjunta en este informe periodístico, se vive un gran temor. Gran parte de la loma se vino abajo y es muy probable que el deslizamiento de tierra continúe.
La Oficina Asesora para la Gestión del Riesgo de Desastres de Cartagena (OAGRD) visitó el sitio. Hasta mandaron drones para tomar fotos, dicen los damnificados. Pero esperan acciones concretas para la atención urgente de la población que anoche durmió en la completa zozobra.
Deslizamientos de tierra en Turbana
Para ir a El Chorro y La Legua, veredas del municipio de Turbana, debemos transitar una vía de herradura hacia dentro desde la doble calzada hacia Barú, antes de Pasacaballos. Ni los mulos pueden pasar por ese camino. Algunos cuadrúpedos quedaban atollados por el nivel característica del barro que se forma. Los deslizamientos se produjeron desde el 7 de noviembre. Esto ocurre a menos de 12 kilómetros del suroccidente de Cartagena de Indias. El día de nuestra visita, llegó una comisión de la alcaldía de Turbana que verificó la situación.
Los daños materiales en los cultivos campesinos de esas veredas se están cuantificando para solicitar la ayuda estatal correspondiente. Estas ayudas se podría tramitar a través de la Oficina de Gestión del Riesgo de Turbana y de la gobernación de Bolívar que dirige José Ricaurte Gómez. Se debe caracterizar a la población, cuantificar los daños para tramitar las ayudas nacionales a través de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres -UNGRD.
Vale decir que se destruyeron varias hectáreas de productos de pancoger, como plátanos, papaya, cuatro filo. Además, varias pozas de piscicultura que fueron borradas del mapa por las toneladas de tierra deslizadas a una altura superior de 10 metros.
Las parcelas afectadas por deslizamiento de tierra
Son más de 5 parcelas de El Chorro las que sufrieron las consecuencias de este fenómeno. Luis Alfredo Caraballo, uno de los afectados, manifiesta que la causa principal de esta situación fue la sobreexplotación de una cantera de piedra contigua a la zona del deslizamiento. Desde que extrajeron miles de toneladas de piedra y arena, esas tierras se volvieron deleznable. Por lo que considera que es la causa estructural del deslizamiento de tierra. Las aguas lluvias que cayeron en los últimos días aceleró el fenómeno.
En estos días para llegar a esos sitios solo se puede hacer a pie, caminando dos kilómetros adentro. El vehículo solo puede llegar hasta la entrada de una de las parcelas. El corazón del deslizamiento se encuentra en la parcela propiedad de Luis Alfredo Caraballo, exedil de la localidad 1.
Caraballo nos colaboró como guía y nos entregó la información necesaria. Hicimos una travesía para llegar al sitio de los hechos. Buscamos que José Ricaurte Gómez, director de la Oficina de Gestión del Riesgo de Bolívar y la alcaldesa de Turbana, Ana Lucía Julio Guerrero. Tomen urgentemente las medidas de atención.
Hay dos caminos para llegar a las veredas de El Chorro. En uno de ellos las mulas quedan atolladas como se puede apreciar en las imágenes del documental publicado. El otro camino es un atajo por los predios de las diferentes parcelas.
Licencias para explotar canteras
El presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de El Chorro y La Legua, Ronald David Meza Bautista, denunció que las comunidades no fueron informadas de licencias para explotar recursos naturales y, especialmente, canteras de piedra caliza y arena. La comunidad considera que esta es la causa de que las aguas lluvias desencadenaran los deslizamientos. Las piedras y la arena se constituía en un sistema de drenaje natural que permitía que las tres fuentes de agua (ojos de agua) que existen en la zona, se filtrara sin causar daño alguno.
Se busca establecer que entidad dio la licencia para la sobreexplotación de esos recursos. Se tiene información sin confirmar que la empresa Argos amplió la licencia de explotación hasta Turbana. Esto, como es evidente, perjudica a pequeños ganaderos y parceleros que podrían ser desplazados de la zona por el impacto ambiental.
Se debe recordar, como lo ha denunciado en varias ocasiones el Comité Ambiental de la JAC, esta es una subecorregión ecológicamente frágil. Está compuesta de un bosque seco tropical estacional o una transición al bosque subxerofítico (bosques muy secos). ¿Qué pasará con esas escasas fuentes de agua que pudimos constar en nuestra visita a las veredas El Chorro y La Legua? Esos bosques están en peligro de extinción que vive de esos ojos de agua. El daño ecológico ha sido inmenso por la minería extractivista.
Daño ambiental incalculable
Según las comunidades, existe una clara causa-efecto de la explotación de las canteras y de los bosques tropicales con el fenómeno del deslizamiento. Además de las especies que han migrado porque no hay vegetación, la población se está quedando sin agua natural.
Esta situación está agravando la deforestación. Un plan de reforestación no funcionaría sin agua. Las escorrentías que quedan deben ser protegidas mediante un plan de recuperación integral del medio ambiente.
Los campesinos y pequeños ganaderos están perdiendo sus pozos y no se encuentra apoyo del Estado para la recuperación de esta importante zona para la economía rural.
Por tanto, la JAC presentará un plan Integral Ambiental al municipio de Turbana, a Cardique y al Ministerio del Medio Ambiente con el fin de responder a los desastres ecológicos que la población está soportando. Este plan implica la remodelación del terreno, la conformación del drenaje para el manejo de aguas lluvias, recubrimiento del terreno con suelo y revegetalización de zonas. Aquí puede ser la oportunidad de aplicar los principios de una economía de decrecimiento: prevenir, mitigar, corregir y compensar los impactos ambientales de la economía campesina.