La paradoja de Daira
Daira Galvis fue ingresada al HUC en 2021/senado. La paradoja de Daira: de la cumbre al infierno.

La paradoja de Daira: de la cumbre al infierno. ¿Por qué la Corte la acusa? La otrora altiva y soberbia senadora de Cambio Radical, Daira de Jesús Galvis Méndez, sobrevivió al Covid-19 (2021) que la llevó hasta las puertas de San Pedro. Pero, el portero del cielo no se las abrió. “¡Quedate un poco más en el infierno!”, le diría Pedro. En cambio, un año después, su navío electoral naufragó en marzo de 2022. No se reeligió senadora. Hoy, probablemente, se encomienda a todos los santos y, en particular, al alma de su eterna compañera María del Socorro Bustamante para enfrentar el juicio más trascendental de toda su vida. Ya no como apoderada sino sentada en el banquillo de los acusados ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ).

En efecto, la Corte la acusó de concierto para delinquir agravado. Ella promovió y financió grupos paramilitares para hacerse elegir como senadora de la república. En el día de hoy, según la Corte, fue llamada a juicio para que responda por ese principal cargo que se le viene haciendo desde hace más de 5 años.

La paradoja de Daira

La paradoja de la vida. Cuando los abogados están en la cumbre de sus éxitos, son prepotentes y altivos. Nadie los baja de esa nube. Sus egos los ciegan. A veces, ni siquiera los grandes golpes de la vida les hace abrir los ojos. Muy pocos hacen como aquél abogado que vendió su Ferrari y sus posesiones para reinventarse y encontrarse consigo mismo después de salvarse de un ataque al corazón. En cambio, ella, en otros tiempos, era una temida penalista que ganó muchas batallas en los estrados judiciales. Y se hizo rica.

Pero, Daira Galvis se olvidó de sus tiempos míseros y de escasez. Fue una mujer formada profesionalmente con una camada de dirigentes de izquierda que se fueron al monte a hacer proselitismo político. Fue un tiempo donde el pan no alcanzaba. Un tiempo de pobreza y sacrificios sin recibir nada material. Sus primeros casos como penalista fue sacar de la cárcel a gente acusada de rebelión. Pero la bolsa estaba vacía. Las monedas no hacían ¡tilin-tilín!

La fama y el dinero vino después. La bolsa se llenó, y demasiado, que no es lo mismo. Salir de un barrio estrato 2 al barrio exclusivo de la élite cartagenera, Bocagrande, al final de los 90, fue un salto de garrocha. Tal vez fueron cuatro contratos profesionales que la hicieron rica y famosa. El que la catapultó a la fama: Caso Giacomo Turra.

Apoderada del capitán Salas

Capitán Alfonso Salas. La paradoja de Daira: de la cumbre al infierno.
Capitán Alfonso Salas.

El ser defensora y apoderada del capitán Alfonso Salas, dueño de la Sociedad Portuaria y de Juancho García la llevó a codearse con los nuevos ricos de Cartagena. Este caso la impulsó a perseguir penalmente al veedor ciudadano Jorge Piedrahita Aduen. Al médico cirujano lo querían matar. Finalmente murió como consecuencia de dicha persecución política. Instrumentalizaron la justicia para sus propósitos malsanos.

La sociedad con Enilce López

La oscura relación con Enilce López y el paramilitarismo
La oscura relación con Enilce López y el paramilitarismo.

No obstante, el trabajo más importante que la llevó a ser una abogada rica y famosa fue al final de la década de los 90. Se hizo la apoderada de Enilce del Rosario López Romero (1952). Casi tienen la misma edad. Ella nació en 1953. Daira obtuvo poder, dinero y fama. Se hizo senadora por primera vez en Convergencia Ciudadana, después de que cayera en desgracia uno de sus socios, Luis Alberto Tuerto Gil Castillo, condenado por la parapolítica.

Las sociedades con López y Gil, paradójicamente, la tienen hoy con una pierna en la cárcel. A raíz de ese trabajo, se codeó con jefes del paramilitarismo antes y después que se sometieran a la Ley de Justicia y Paz en 2005.

Existen varios testimonios y pruebas irrefutables que determinó a la Corte a llamarla a juicio. Uno de esos sólidos testimonios es de alias 28 del frente paramilitar de Barranquilla y Atlántico. En 2002 hizo campaña para el senado en la lista liderada por Tuerto Gil, un exguerrillero y excompañero de izquierda de Daira. Tal parece que acordaron que ella recibía el apoyo paramilitar de la Costa Caribe, especialmente de Bolívar y el Atlántico.

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El naufragio de su barco

La paradoja de Daira Galvis refleja su vida. En tanto, su socio contaba con los votos de los santanderes y otras zonas del interior del país dominadas por el paramilitarismo. El final de esta parte de su historia no está escrita. Su habilidad y capacidad como penalista la llevó a eludir a la justicia desde aquella época cuando tenían poder en el senado, en la gobernación de Bolívar y en la alcaldía de Cartagena.

Gil Castillo cayó luego de ser reelegido al senado. El 17 de enero de 2012 fue condenado a siete años y medio de cárcel por la Corte Suprema de Justicia. Daira, en cambio, aún sigue batallando. ¿Será su última batalla después de quedar disminuida por el Covid-19, el haber muerto su eterna compañera y ver naufragar el poderoso barco político en 2022?

Sin duda, la paradoja de Daira es una historia real que todavía no se ha terminado de escribir. La protagonista tiene frente a ella la batalla más grande de su vida: su propia vida.

Las preguntas que Daira no le respondió a la JEP

La JEP, el frustrado intento. La paradoja de Daira: Del cielo al infierno.

El 15 de julio de 2022, cuando Daira Galvis Méndez se iba a presentar ante la JEP, publicamos un seriado. En la segunda entrega seleccionamos varias preguntas que ella no pudo responder ante ese tribunal de justicia alternativa.

Las preguntas clave las hicimos. Pero ella no fue capaz de responder. ¿Desde cuándo Daira Galvis Méndez comenzó su relación con Enilce López? ¿Desde antes de 2000? ¿A cuántas reuniones asistió con Salvatore Mancuso, Uber Enrique Banquez Martínez (alias Juancho Dique), Diego Vecino, Rodrigo Antonio Mercado Pelufo (alias Rodrigo Cadena) y alias Román Zabala y otros jefes paramilitares? ¿Por qué aceptó las condiciones de alias Ernesto Báez? ¿Qué otros políticos y empresarios participaron en dichas reuniones?

La senadora tendrá que hablar de su secuestro express por la guerrilla en aquella época en que no se podía transitar por las carreteras de la Costa Caribe. Debe reconocer si este fue el motivo para apoyar a los paramilitares en su lucha contra la guerrilla. Ella fue una mujer militante de organizaciones de tendencia marxista-leninista pensamiento maoista. Algunas organizaciones de éstas devinieron en las primeras guerrillas que operaron en las sabanas de Córdoba, Sucre y Bolívar. Guerrilla que azotó principalmente a pequeños ganaderos de la región con la famosa “vacuna” y los secuestros con fines extorsivos.

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¿El final de Daira?

La suerte de Daira Galvis está ligada a la de Enilce López y la de Gil Castillo. Pero también a la de Jonis Rafael Acosta, alias “28, sicario del Frente José Pablo Diaz en los años que los paramilitares eran el brazo armado de la clase política de Barranquilla y el Atlántico. Los dos primeros están en la cárcel. Pero, Daira cree que seguirá eludiendo a la justicia. Unas veces presentándose ante la JEP, otras veces visitando las cárceles para hacer cambiar los testimonios de sus acusadores, sus otrora socios.

Sin embargo, parece que el final se avecina. Los tiempos en los que su apartamento de Tacasuan se atiborraban de líderes políticos y comunales se acabaron. Esos tiempos, en donde sus colaboradores debían esperar largas horas para ser atendidos a altas horas de la noche, hablan del poder que tenían. Hasta otros senadores la iban a visitar a buscar alianzas. ¿Llegará el final de Daira Galvis en La Picota? Los magistrados de la Corte Suprema de Justicia tienen su suerte en sus manos.

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