¿El asesinato de Laura Vanessa Molinares Martínez puede hacer parte de una lista macabra que sus autores intelectuales ya pagaron? Una fuente del bajo mundo le reveló a VoxPopuli Digital que en esa lista hay empresarios y probablemente un periodista. Este dato no fue confirmado por la Policía Metropolitana de Cartagena―Mecar. Pero debe hacer encender las alarmas a las autoridades estatales de Cartagena de Indias, especialmente del Distrito y de la Policía Nacional.
La fuente dijo que es probable que se presenten nuevos sicariatos en los próximos días. Muchas veces ejecutan dos o tres personas de una lista, sin embargo, si hay efectividad de las pesquisas de la Policía y la Fiscalía, se ven obligados a detener su ejecución. El dato diferencial que dio esa fuente es que el asesinato de Laura Vanessa Molinares y Ronald David Gómez Cervantes (concejal de Tolú), además de pertenecer a la lista macabra, la está ejecutando una organización “independiente” de las estructuras criminales que dominan las áreas estratégicas de la ciudad.
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La lista macabra y la Policía
En Cartagena operan diferentes estructuras armadas. La mayoría de los sicariatos se producen como parte de su operatividad. No se tiene identificado de qué sector mafioso viene la orden de matar. La fuente señaló que es muy probable que sea una lista estructurada obedeciendo a diferentes pedidos.
Le corresponde a la Policía y a la Fiscalía identificar de dónde pudieron venir las órdenes de asesinato. Se debe identificar qué oficina de cobro está ejecutando esa lista de homicidios.
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“Matar al periodista no matará la historia”
El hecho de que informen que en la lista puede estar un periodista, se puede percibir como una intimidación al ejercicio libre del periodismo en Cartagena. El periodismo de investigación y análisis que hacemos es un esfuerzo para entender la vida cotidiana en el espacio vital de nuestros territorios. Dejar de investigar y construir esas historias que desvelan los oscuros propósitos de la mafia incrustada en los diferentes estadios de la sociedad colombiana, es una condena a la inseguridad y a la agonía de toda una sociedad. Forbidden Stories, Historias Prohibidas, es un proyecto que busca continuar, por ejemplo, la denuncias del periodista Rafael Moreno, asesinado el 16 de octubre en Montelíbano, sur de Córdoba.
Por esa razón, es necesario que el Fiscal y el comandante de la policía se pronuncien sobre la existencia de esa supuesta lista en la que está incluido un periodista. Vale decir que el periodismo de investigación tiene como finalidad destapar hechos escondidos. Son historias que buscan la verdad escondida o que alguien quiere esconder. Los autores de estas amenazas y crímenes contra periodistas buscan silenciar al periodismo, en su conjunto.
Por ejemplo, el hecho mismo que VoxPopuli Digital entró a investigar sobre el supuesto complot para asesinar a los abogados veedores Héctor Pérez Fernández y Erick Urueta Benavides, y al presidente de la Asociación de Campesinos Montes de Dios de Cachenche, Enaldo Tovar, pone en peligro al periodista debido a la crisis profunda de nuestra sociedad. Solo si miramos que los supuestos conspiradores no son mafiosos reconocidos sino supuestos empresarios socios del Club Campestre de Cartagena, demuestra la pérdida de valores.
Ninguna de esas amenazas va a silenciar al periodismo. Las historias y sus autores se van a conocer siempre y cuando haya un periodismo independiente de los poderes privados y públicos. Si pretenden silenciar al periodismo, conseguirán todo lo contrario.
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Así mataron a Laura Vanessa
El asesinato ocurrió en la carrera 68 con calle 25 del barrio Blas de Lezo de Cartagena, después de las 8:20 de la noche del sábado 12 de agosto. En el primer piso del edificio funcionan dos negocios. “Asado X Kilo” y una pizzería recientemente entrada en servicio. Al parecer, era un nuevo emprendimiento de la víctima que había comenzado a funcionar esta semana.
En un video que circuló y al cual tuvo acceso VoxPopuli Digital, se observa a Laura Vanessa hablando y haciendo gestos como si estuviese llamando la atención a una de sus empleadas del establecimiento comercial. De pronto, llegó un individuo joven vestido con una camiseta con el logo de Nike y gorra oscura. Se situó detrás de la trabajadora que hablaba con la joven empresaria. Pudo identificar a su potencial víctima a menos de dos metros. Otro empleado le atendió el supuesto pedido. Una vez, hecho eso, se abrió dos metros a su izquierda y, al mismo tiempo, desenfundó la pistola y sosteniendola con las dos manos, abrió fuego. Fueron aproximadamente tres balazos que se alojaron en la cabeza y en el pecho.
Un par de segundos después, se veía en el suelo a la joven empresaria en estado agónico y un charco de sangre que manaba de su cabeza. El sicario salió raudo por donde entró. De inmediato, una vez respuesto del shock, algunos empleados la transportaron hasta el centro asistencial de urgencia más cercano donde se dictaminó oficialmente su deceso.
La emprendedora y el concejal ¿estaban en la lista macabra?
Hasta ahora no hay ninguna evidencia que indique si existe relación en los homicidios por encargo de ese día. Tampoco entre Laura Vanessa Molinares y el concejal de Tolú, Ronald Gómez Cervantes. Mientras tanto, la Mecar solo se limitó a reseñar estos homicidios sin aportar nada adicional. Llama la atención que los tres hechos de sangre ocurrieron en un lapso de cuatro horas del 12 de agosto. Pero, por lo menos, hay muchas preguntas que se deben plantear ante la opinión pública sobre la muerte de la emprendedora y del concejal.
En cuanto a la emprendedora, se dice que había abierto recientemente la pizzería. Compartía terraza con “Asado X Kilo”.
Algunos que conocían a Laura Vanessa señalaron a VoxPopuli Digital que, al parecer, tenía relaciones sentimentales con un individuo, cuya actividad económica no se conoce. Pero, todo indica que le apoyaba en sus emprendimientos. Esas mismas fuentes dijeron que solía ir con frecuencia a México.
La crisis de seguridad en Cartagena de Indias tocó fondo. El gobierno Distrital invierte $3,5 mil millones en CAI blindados. Es decir, para protegerse ellos ¿y la ciudadanía? Una ciudad caótica, líquida y desmembrada, se merece el gobernante que tiene. Es hora de cambiar esta situación.