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Se revive debate político sobre despojo de Barú. En 1887, 94 familias propietarias de la Hacienda Santa Ana de Barú vivían aisladas del mundo exterior. Se autoabastecían en todos los aspectos. Cultivaban, pescaban, criaban animales y cazaban lo que necesitaban para vivir. Practicaban el trueque como una forma de intercambio comercial. No necesitaban el dinero. Eran felices, hasta cuando llegaron otros afros blanqueados —de la servidumbre de «los blancos»— con bolsas de dinero. Detrás de ellos sus «amos blancos» llegaban comprando predios a precios de despojo que escrituraron ilegalmente con la complicidad del sistema judicial y notarial de Cartagena.

La jueza Sexta Administrativa del Circuito de Cartagena, Laura Arnedo Jiménez, le dio vida jurídica al «cheque en blanco» sin tener en cuenta los derechos fundamentales a la prevención ambiental y a la participación ambiental. Son derechos inalienables e indivisibles de las comunidades asentadas en la ecorregión Canal del Dique.

La simpática, inteligente y hermosa primera dama de Colombia, Verónica del Socorro Alcocer García, declinó una invitación a desfilar en la carroza anticorrupción. Igualmente no aceptó exhibirse junto a William Dau Chamat en el palco central del bando ubicado en la avenida Santander. En realidad, la primera dama se salvó de la sonora abucheada que los cartageneros le tenían reservada a su alcalde calificado por inepto, corrupto y desconsiderado.

Bastaron 24 horas de lluvia en forma intermitente, de una protesta social de los mototrabajadores y de que los sicarios asesinaran a niños inocentes, para que los cartageneros comenzaran a darse cuenta en qué ciudad viven. Ahora, se hace más evidente el caos social, político y urbanístico de una Cartagena de Indias que vive su propia pesadilla. Una pesadilla creada por su mala cabeza de elegir alcaldes incompetentes, insensibles y peligrosos. ¡Cartagena colapsó!

Víctimas del desplazamiento y el despojo forzados, acaban de radicar ante la Unidad Administrativa Especial de Gestión de Restitución de Tierras Despojadas (Unidad de Restitución de Tierras) una solicitud de revocatoria de la resolución RB 00363 del 20 de marzo de 2019. Este acto administrativo negó una solicitud de iniciar el estudio formal de inscripción en el Registro de Tierras Despojadas y Abandonadas Forzosamente de un predio denominado “Las Delicias” en poder de la familia Botero Maya de Magangué.

¿Negligencia de UNP? Con ocasión del incidente donde supuestamente un contratista había “apagado vía satélite” varios vehículos blindados tipo 5 de uso de varios expresidentes y de una élite de defensores de derecho humanos, se pudo comprobar que se debió a una evidente omisión y negligencia del director de la UNP-Unidad Nacional de Protección, Augusto Rodriguez Ballesteros.

¡Basta! Un profundo dolor, consternación y rabia produjo en el día de hoy el homicidio de una menor de tan solo 10 años de edad. El hecho se presentó cuando su padre, Antonio Llorente Arcia, sufrió un atentado mortal en las afueras del colegio Biffi de Cartagena. Los sicarios dispararon indiscriminadamente cuando las tres hijas del comerciante se encontraban en el interior de la camioneta.